A partir de la segunda parte del Siglo XX, en el contexto de la Guerra Fría, y posteriormente durante la década de los años noventa, se ha desarrollo aceleradamente todo un proceso de construcción y aplicación de nuevas tecnologías (Rivas Fernández, 2001, pág. 42); esta era tecnológica ha abarcado diferentes ámbitos de la vida en sociedad: educación, entretenimiento, administración, etc. Toda esta nueva experiencia es de vital importancia en un contexto donde la utilidad de los recursos archivísticos son utilizados para analizar y organizar la información contenida en soportes tanto papel como electrónico.
Una eficiente ubicación documental es imprescindible, es en este punto específico donde la tecnología juega un rol fundamental:
“El mayor impacto que las tecnologías de la información ejercen sobre el campo de los archivos se relaciona con las posibilidades que brindan las redes de comunicación para accesar e intercambiar información, con lo cual tanto el usuario interno como el externo resultan beneficiados; en igual proporción se incrementan las posibilidades de la difusión de información a un público más amplio, lo que incide en un mayor dinamismo de los archivos”. (Rivas Fernández, 2001, pág. 61)
A través de estos cambios se han venido dando nuevas maneras de conservación y administración a la información y brindando el mantenimiento a un documento, hablando específicamente al área aplicativa en la Archivística, como lo es el caso de las mapotecas, vistas como una herramienta de almacenamiento de mapas dentro de instituciones en donde se da un uso frecuente de esta tipología documental de representación, no solo de carácter gráfico y de espacio, sino también de los contenidos conceptuales para procedimientos, de los cuales, se brinda información variada con respecto a la institución productora de estos elementos y van digitalizando y proporcionando los recursos vía Internet.
Fuente
Rivas Fernández, B. (2001). La tecnología de la información al servicio de la archivística. Reflexiones, Universidad de Costa Rica, Facultad de Ciencias Sociales, 67-75.

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